Nuestro intrépido Presidente Bernardo Arévalo y su fiel escudero, el Ministro de Finanzas Jonathan Menkos, han decidido que es hora de hacerse escuchar y vaya que lo están haciendo. Después de no lograr convencer a los honorables diputados del Congreso de la República de Guatemala para aprobar el tan ansiado Estado de Calamidad, han lanzado una campaña que ni el mejor publicista de Hollywood podría haber imaginado.
Esta mañana, el Ministerio de Salud, cual Robin Hood moderno, envió un mensaje de manipulación por un chat, asegurando que con el "reajuste" presupuestario se garantizará una atención digna para todos. ¡Qué corazón tan noble! Claro, porque cuando uno piensa en atención médica de calidad, lo primero que viene a la mente es un mensaje de WhatsApp lleno de promesas vagas y sin fundamento.
Resulta curioso que ahora todo se trate de una simple "ampliación" presupuestaria, pero llamémoslo "reajuste" porque suena menos amenazante, ¿verdad? Es como cuando un niño no obtiene su juguete favorito y entonces le dices que no es un castigo, solo es "un cambio de planes". Así que, aquí estamos, viendo cómo se intenta maquillar una maniobra política con la misma sutileza con la que se pondría labial a un cerdo.
El mensaje del Ministerio de Salud promete programas de salud que "garantizarán atención digna para todos". ¡Maravilloso! Porque sabemos que hasta ahora el sistema de salud ha sido un verdadero paraíso de eficiencia y cuidado, ¿no? Con esta ampliación... perdón, reajuste, parece que los ciudadanos por fin podrán disfrutar de esas salas de espera abarrotadas con la calidez de una sauna y las camas de hospital con la suavidad de un colchón de resortes.
Pero no nos engañemos, esto no es más que un berrinche presidencial disfrazado de estrategia. El Presidente Arévalo y su equipo están decididos a hacer todo lo posible para salirse con la suya, incluso si eso significa bombardearnos con propaganda disfrazada de mensajes oficiales. Al fin y al cabo, cuando se trata de cumplir caprichos, cualquier medio es válido, ¿cierto?
Así que, estimados lectores, prepárense para una avalancha de mensajes sobre cómo este "reajuste" presupuestario será la panacea para todos nuestros males. Porque si hay algo que hemos aprendido, es que cuando los políticos hablan de "ajustes", generalmente están ajustando la verdad para que encaje en su narrativa.
#ConTransparenciaGuatemalaSaleAdelante. O al menos, eso dicen.
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